El crowdfunding y sus beneficios
Es común que al momento de hablar de financiamiento para tu negocio o nuevo proyecto, se nos venga a la cabeza los típicos préstamos de amigos, de familiares, créditos bancarios, o inversiones tradicionales. Pero hoy existe otra alternativa que va ganando cada vez más adeptos, este es el Crowdfunding, pero. ¿Qué se entiende por Crowdfunding?
El Crowdfunding se entiende como una cooperación colectiva que reúne a varias personas interesadas en realizar un proyecto, consiguiendo o aportando recursos que permitan obtenerlo, mediante un financiamiento colectivo. Es la solución para los casos de personas autónomas o pequeños empresarios que no encuentran resultados en los canales normales y típicos de financiamiento, como lo serían los bancos y/o entidades prestadoras de dinero.
Si te encuentras buscando financiar una idea de negocio para tu emprendimiento, puedes explicarla en un sitio web de crowdfunding. En estas plataformas las personas que quieren, pueden invertir en algún proyecto. Pueden leer las descripciones y posteriormente realizar sus aportes a través de los canales de pago que ofrece la plataforma.
A continuación te presentamos los tipos de crowdfunding más usados por emprendedores y empresas.
Tipos de crowdfunding
Donación
Las donaciones de comunidades existen desde hace muchísimos años. Cuando hablamos de una comunidad, hacemos referencia a un grupo de personas que tienen una causa o un interés común.
Por tanto, las donaciones de comunidades pueden ir destinadas a una causa solidaria: una catástrofe, un grupo desfavorecido, la investigación de una enfermedad, etc. Como también son utilizadas para conseguir un objetivo o interés común: como a partidos políticos, religiones, clubes deportivos, etc.
Actualmente, internet y las redes sociales han jugado un papel esencial en el desarrollo de estos movimientos. El crowdfunding de donaciones se organiza en un sitio web, donde se plantea el proyecto y se hacen las donaciones. Por otra parte, las redes sociales han sido fundamentales en la irrupción de estas plataformas, difundiendo exponencialmente el mensaje solidario o el mensaje de interés común.
Préstamo e inversión
El crowdfunding de préstamo es aquel que ofrece a la persona que aporta los fondos el retorno de la misma cantidad de dinero sumada a un tipo de interés.
La persona que aporta actúa como prestamista o inversora, esperando un retorno de su inversión consistente en un tipo de interés aplicado sobre el dinero aportado.
Las plataformas de crowdfunding de préstamo son muy estrictas con la aceptación de los proyectos que publican, precisamente para conseguir una tasa de morosidad mínima, que llega a ser de cero en muchos casos. Algunos de los criterios que aplican son los siguientes.
- Que el proyecto esté representado por una sociedad comercial.
- Presentar cuentas anuales.
- Tener capacidad de retorno del préstamo con la facturación mensual.
- Que una entidad bancaria esté dispuesta a concederle un crédito a la sociedad.
Recompensas
El crowdfunding de recompensa es aquel en el que se ofrece un producto o servicio como ganancia al aporte que cada persona realiza al proyecto. Se utiliza en los momentos iniciales, cuando el emprendedor empieza a ejecutar su idea.
Inicialmente los emprendedores usaban este tipo de financiamiento masivo para subvencionar películas, grabaciones de discos o documentales… La “recompensa” que obtienen los inversores era una entrada de cine, una copia de un disco o poder presenciar en primicia el proyecto terminado.
Otro articulo de interés: Cómo manejar las finanzas de tu negocio en cada etapa de crecimiento.
¿Qué beneficios tiene el crowdfunding?
A continuación identificamos los beneficios que aporta este nuevo sistema de financiamiento colectivo, frente a modelos tradicionales.
Amplía y conecta más fácilmente la oferta de proyectos y el financiamiento
Internet no tiene barreras, es un canal que permite llegar nuestra oferta a un número incalculable de potenciales interesados. Los costos de distribución a posibles inversores/donantes son prácticamente marginales. Para que la propuesta tenga éxito hay que apoyarla en una buena estrategia de comunicación, pero esa estrategia no tiene por que ser necesariamente costosa.
Una de las principales críticas que se viene haciendo a los modelos de inversión actualmente existentes, es que solo un número muy reducido de organizaciones tiene facilidad para acceder a los mismos.
Disminuye los costos de transacción
La plataforma facilita la decisión de financiamiento eliminando los procesos, papeleos e intermediarios de todo tipo. No es necesario un análisis profundo, ni perder horas en reuniones con expertos, ni rellenar formularios. Todo el proceso se reduce a unos cuantos clics. Un clic para entrar a la plataforma y conocer las propuestas de los emprendedores y otro para autorizar la transacción económica o para salir si es que no te interesa. Las plataformas cobran una sencilla comisión (entre un 5 a 8%) en el caso de que el proyecto tenga éxito.
Reduce la información
Al ser sencillo y transparente todo el proceso reduce la información asimétrica. Los emprendedores y financiadores se encuentran en una posición equilibrada. Toda la información relevante se encuentra en la sección habilitada por la plataforma para alojar el proyecto. No hay letra chica, tampoco hay teléfono para resolver dudas o ampliar la información.
Democracia del financiamiento
El hecho de que la financiación no exija grandes cantidades de dinero, permite participar a un gran número de personas. Puede que internet no sea el mejor canal para captar a grandes inversores, pero sí permite captar a muchas personas que pueden invertir pocos montos de dinero.
Más identificación y compromiso con el proyecto
El crowdfunding permite conectar a consumidores motivados con los emprendedores en las fases iniciales del proyecto, facilitando que aquellos puedan influir a estos. Generalmente las solicitudes de apoyo no se reducen a la demanda de financiamiento, sino también a la difusión de la iniciativa, solicitar el feedback o peticiones de ayuda de diversos tipos. Se genera así un sentido de compromiso y participación en el proyecto que va más allá de la compra de un producto o servicio.En muchos proyectos de crowdfunding, además, los financiadores (backers) pueden influir en las fases de diseño del producto o lanzamiento de la iniciativa.